Trabajo 1: Debate sobre el Bullying.

 

El bullying o acoso escolar es el maltrato físico y/o psicológico deliberado y continuado que recibe un niño por parte de otro u otros, que se comportan con él cruelmente con el objetivo de someterlo y asustarlo, con vistas a obtener algún resultado favorable para los acosadores o simplemente a satisfacer la necesidad de agredir y destruir. Este problema está a la orden del día y los niños tienen que estar concienciados. La mejor forma de hacerlo es desde el aula. 

Se puede proponer un debate en una clase de 50 minutos-1 hora, con una serie de normas puestas por la maestra. La profesora al llegar a clase, les comentará que se va a tratar un tema importante y que deben respetar el turno de palabra de sus compañeros, levantar la mano si quieren decir algo y escuchar muy bien. Esta, les preguntará que si saben que es el bullying. No todos lo sabrán en 3º E.P, por lo que leerles un teatro les hará entenderlo un poco mejor. 

Teatro:

Personajes: 

• Alejandro (acosador 1)
• Víctor (acosador 2)
• Mateo (víctima)
• Elisa (maestra)

(La escena ocurre en un colegio a la hora del recreo. Están Alejandro y Víctor jugando a la pelota. Se acerca Mateo).

MATEO. - ¡Hola!, ¿Puedo jugar con vosotros?

ALEJANDRO. - Mmm déjame pensar.

(Alejandro mira a Víctor y se ríen).

VICTOR. - Ya lo hemos pensado y no puedes jugar con nosotros.

MATEO. - ¿Por qué no puedo jugar?

ALEJANDRO. - Porque estás gordo.

VÍCTOR. - Sí, y nosotros no jugamos ni nos llevamos con gordos.

MATEO. - Pero yo no estoy gordo.

ALEJANDRO. - ¿No te has mirado bien en el espejo?

(Risas de Víctor y Alejandro).

MATEO. - Bueno tal vez un poco pero no importa, puedo jugar con vosotros igualmente, ¿no?

VÍCTOR. - Mmm mejor no, sólo vas a hacer que vayamos más lentos. No puedes jugar.

MATEO. - ¿Por qué sois así conmigo?

ALEJANDRO. - Por gordo.

(Se ríe)

MATEO. - Sois muy malos y no os he hecho nada, solo quiero jugar. Voy a hablar con la profe Elisa.

VÍCTOR. - Aparte de gordo, chivato.

ALEJANDRO. - Si te chivas a la maestra y nos regaña, te vamos a dar igual que a esta pelota.

(Alejandro y Víctor salen de escena. Mateo se queda triste y con miedo. Entra la profesora).

MAESTRA. - ¿Qué te pasa Mateo?

MATEO- Nada profe, estoy bien (contesta con miedo).

MAESTRA. - Puedes confiar en mí y decirme lo que pasa. Dime.

MATEO. - Bueno, es que no debería decirlo porque después me dirán que soy un chivato y me pegarán.

MAESTRA. - ¿Quién te dijo eso?

(Mateo se queda en silencio).

MAESTRA. - ¿Fueron Alejandro y Víctor verdad? Vi que estaban hablando contigo hace un momento, qué fue lo que te dijeron?

MATEO. -Pero no les diga nada profe, me dijeron que no podía jugar con ellos porque estoy gordo.

MAESTRA. - No te preocupes Mateo no te harán nada, voy a hablar con ellos.

(La maestra llama a Alejandro y a Víctor).

MAESTRA. - Alejandro, Víctor, ¿podéis venir un momento por favor?

(Se acercan Alejandro y Víctor).

ALEJANDRO. - ¿Qué pasa maestra?

MAESTRA. - ¿Por qué no dejáis que vuestro compañero Mateo juegue con vosotros?

VÍCTOR. - Es que maestra, Mateo está gordo y sólo nos va a atrasar en el juego.

MAESTRA. - No deberían decirle nada por su cuerpo, a él ni a nadie. Todos tenemos cuerpos diferentes y eso no afecta la manera en la que somos por dentro.

MATEO. - Es verdad, además soy muy rápido corriendo por ejemplo.

MAESTRA. - No creo que a vosotros os gustaría que no os dejaran jugar por vuestro peinado, o por vuestra altura o por lo que sea.

VICTOR. - Tienes razón profe, no me gustaría. Mateo ven a jugar con nosotros.

ALEJANDRO. - Sí, perdónanos, no volveremos a molestarte, vamos a jugar.

MATEO. - Gracias profe, iré a jugar ahora.

(Se dirige a la maestra)

MAESTRA. - Sí, Mateo y recuerda que siempre que alguien te moleste o te diga cosas que no te gusten, debes decirlo y no quedarte callado.

(Los tres niños salen de escena riendo y jugando con la pelota. La maestra se queda feliz).

Después de leerles el teatro, se les mirará con atención para ver sus reacciones y se dará comienzo al debate. La maestra, lanzará una pregunta a toda la clase.
“¿Qué pensáis del texto que acabo de leer?” Aquí, no todos los niños, levantarán la mano. Se elegirá a dos o tres de ellos para responder a la pregunta. Lo más probable es que el primero que conteste diga, que lo que hacen los acosadores es malo y el segundo y el tercero que opinan lo mismo. Aquí, entra la maestra de nuevo a preguntar a la clase. “¿Estáis de acuerdo con vuestros compañeros con que Alejandro y Víctor no actúan correctamente?”. También dirían que si a coro. La maestra les preguntaría por qué, y esa pregunta se podría enlazar con que si alguna vez les ha pasado que no hayan querido jugar con alguien en el patio o fuera del colegio. De esta manera, los niños entrarían en debate entre ellos y la profesora haría de mediadora, mientras se va apuntando las cuestiones tratadas durante el debate para luego evaluar a los alumnos.

Para mediar un diálogo entre una clase, lo único que haría la profesora sería darles el turno de palabra, puesto que ellos deberían tener claro las tres normas básicas y respetarse entre todos. Intervendría lo mínimo posible, para lanzar alguna pregunta si ve que el diálogo se está quedando muy escueto (con preguntas como “¿Os habéis sentido como Víctor alguna vez?”, “¿Hubiérais actuado como Víctor diciéndoselo a la profesora?, ¿Si veis que está pasándole eso a un compañero, lo contaríais?) y para frenar a los niños que sean más molestos y animar a los más tímidos. A los más molestos, cuando vayan a hacer una intervención para quedar por encima de sus compañeros, se les debe hacer ver, que la profesora está por encima de ellos y que molestando no consiguen nada, que pueden dar su opinión sin necesidad de llamar la atención. Por otro lado, con los niños más tímidos, se tiene que intervenir para que hablen. La profesora, en vez de dejar contestar a otro compañero, puede hacer hablar a estos niños que les cuesta más, puesto que solos, serán incapaces o les costará más.

Además, la postura de la profesora es muy importante y en ningún momento deberá sentarse en la silla. Debe moverse por la clase escuchando a los niños o debe sentarse en la mesa para que así los alumnos vean autoridad al ser la mediadora y que no vean desinterés por parte de esta.

Cuando se finalice el debate, se recordarán todas las cuestiones tratadas durante este para sacar conclusiones entre todos y así aprender de verdad sobre este tema y a actuar ante una situación así, siendo recomendable para la profesora escribir apuntes del debate: qué cuestiones se tratan, a qué conclusiones se llegan, cómo entonan los niños, etc., ya que es una actividad evaluable que será evaluada mediante dos rúbricas, una de comprensión oral y otra de expresión oral.

COMPRENSIÓN ORAL	MUY BIEN	BIEN	REGULAR	DEBE MEJORAR
EXPRESIÓN	Se expresa de manera clara todo el tiempo.	Se expresa apropiadamente pero no todo el tiempo.	Se expresa apropiadamente en pocas ocasiones.	No se expresa de manera clara en ninguna de las ocasiones.
ENTONACIÓN	Muestra una adecuada entonación todo el tiempo.	Muestra una adecuada entonación, en ciertas ocasiones.	Muestra una inadecuada entonación en las actividades orales.	No consigue una adecuada entonación.
PRONUNCIACIÓN	Pronuncia de forma clara.	Pronuncia de forma adecuada.	Pronuncia de forma inadecuada.	No consigue pronunciar, llegando hasta a tartamudear.
MOTIVACIÓN DEL ALUMNO	El alumno se muestra motivado y muy activo en el desarrollo de la actividad.	El alumno se muestra motivado.	El alumno no se muestra motivado en la actividad.	El alumno no se muestra ni activo ni motivado. Para que hable, se le tiene que incitar.

 

EXPRESIÓN ORAL	MUY BIEN	BIEN	DEBE MEJORAR
CLARIDAD Y VOLUMEN DE LA VOZ	He hablado claramente todo el tiempo, de forma pausada. El tono de voz ha sido adecuado.	He hablado claramente todo el tiempo, aunque a veces el tono de voz no ha sido adecuado. Mis compañeros no me podían escuchar.	He hablado en voz muy baja. Mis compañeros no me han escuchado.
VOCABULARIO	Se expresa con un vocabulario rico y variado con alto contenido semántico. Es capaz de cambiar de registro.	Se expresa con un vocabulario limitado, coloquial e impreciso. Utiliza vocabulario básico en oraciones simples.	Vocabulario impreciso y genérico, con excesiva presencia de vulgarismos. Sustituye palabras con significado léxico por otras de contenido gramatical.
COHERENCIA GRAMATICAL	El discurso sigue una estructura lógica y coherente. Expone sus ideas de forma concreta.	El discurso es coherente y presenta una unidad temática definida.	El discurso es incoherente y no presenta unidad temática ni secuencia lógica.
CONTEXTUALIZACIÓN	He seguido el hilo de la conversación en todo momento, siendo capaz de dar detalles y poner ejemplos.	He hablado de forma escueta.	No he seguido el hilo, hablando de cosas distintas.
VOCALIZACIÓN	He vocalizado y pronunciado correctamente.	He vocalizado bien pero me cuesta pronunciar.	Cuesta entenderme. Tengo dificultad para pronunciar alguna palabra.